La firma legal LEX & Co alerta contra aseguradoras fraudulentas

En la actualidad, miles de personas buscan servicios financieros todos los días y son susceptibles de caer en estafas cometidas por empresas fraudulentas. Carlos Figueroa, abogado titular de la firma legal LEX&CO nos cuenta sobre las aseguradoras fraudulentas o denominadas “patito” y los posibles daños que ocasionan a las personas que confían en ellas.

De acuerdo con el titular de LEX & CO, la falta de cultura financiera en México y una actitud de dejadez puede causar que una persona confíe en una aseguradora que le ofrezca un costo muy bajo y que buscan crear confianza y cercanía para que los usuarios no duden en recurrir a sus “servicios”.

Figueroa indica que hay dos tipos de aseguradoras: las que se encuentran registradas ante la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas y son reguladas por dicha institución, por lo que deben actuar con base en la Ley de Instituciones de Seguros y de Fianzas, así como la Ley de Contrato de Seguro.

Su contraparte son aseguradoras que trabajan sin contar con la autorización y regulación de la Comisión. En su mayoría, son extranjeras y venden sus servicios en México a pesar de no contar con registro oficial. Se conocen como aseguradoras offshore y es un riesgo muy grande el contratar una póliza de seguros con ellas.

¿Qué es lo peor que puede pasar?

Una persona puede optar por una aseguradora offshore tras recibir una oferta muy atractiva, por parte de un agente de seguros convincente y que ofrece grandes beneficios. Probablemente pasen meses, o incluso años sin saber que está siendo estafado… hasta que sea víctima de un siniestro y, al presentar su reclamo, se encuentre con la sorpresa de que su póliza no está en vigor, que no está registrado como cliente o, peor, que la aseguradora no existe.

El abogado titular de LEX & CO alerta sobre el riesgo de hacer negocios con una aseguradora falsa, patito u offshore, ya que podrían ser sancionados al incumplir con obligaciones como contar con un seguro de autos para circular por carreteras federales. En casos más graves, el asegurado podría no tener con qué responder en caso de un siniestro, perder su dinero en el pago mensual de la póliza y no contar con protección para cuando se necesite.

Figueroa recomienda evitar agentes de seguros o aseguradoras que anuncian seguros baratos a través de redes sociales, aplicaciones de mensajes o llamadas telefónicas, y huir de quienes pidan pagos en efectivo, por redes sociales o transferencias bancarias. Asimismo, es importante no dar datos confidenciales con personas no autorizadas oficialmente.

Recurrir a una aseguradora reconocida, acudir a la oficina del agente a hacer los trámites, leer los contratos y asegurarse de que se trata de una institución registrada y que cumple con todas las regulaciones es una forma de evitar ser víctima de estos fraudes.